viernes, 30 de septiembre de 2016

Punto de quiebre

Punto de quiebre

Escrito por Lilo de Sierra
punto-de-quiebre
“Las lágrimas que derramamos cuando sembramos la semilla, se volverán cantos de alegría cuando cosechemos el trigo”.
(Salmos 126 TLA)
Me quiebro, grita mi alma angustiada; golpeada por la fuerza de un tsunami de emociones; duele, sangra, lloro y no puedo callar las voces en mi mente que me desaniman a continuar luchando por mi sueño. Arrodillada frente a mi cama, clamé y pedí al Dios del cielo una oportunidad, repetí una y mil veces que no quería defraudarlo y que si Él decía sí, haría todo lo que estuviera a mi alcance por cumplirle.
El tiempo pasa y siento que he fracasado. No puedo más, decidí creer, amar, luchar, pero me rindo ante el ímpetu de mi propio orgullo, que con desdén disfruta mi derrota. Luna llena testigo de cada lágrima, cada palabra susurrada clamando perdón y fuego en mi interior; pero el silencio desgarrador, la indiferencia y la rudeza del viento que amenazaba con derribarme han logrado su cometido.
Decido callar, mil palabras sin sentido no lograran evitar que el frío gobierne mi corazón. Jesús me vio, me amo cuando nadie más lo hizo, en medio de mi imperfección me hizo sentir valiosa ante sus ojos y esa es la esperanza que llena hoy mi mente y todo mi ser. Volver a sentir ese primer amor, tener la seguridad de ser especial y única para aquel que me acepta tal cual soy, es lo único que me sostiene en pie.
Me encuentro en el punto cero, desesperada y sin esperanza. Lo veo venir y me postro ante su presencia porque necesito de su poder sanador en éste preciso instante. Ya no hay gozo pero volveré a cantar, porque el Príncipe de paz marcha victorioso hacia mí.
Anhelo recuperar el tiempo perdido, nada tiene sentido si Él no está conmigo. Lo amo, lo necesito, mi plan cumplido está, el propósito de haber pasado por su vida ya fue consumado. Ha llegado la hora de continuar, de descansar, de dar un paso al costado para permitirle crecer y llegar a ser lo que el Señor ya tiene planeado para él en el futuro. Tiene razón cuando dice que no paro de quejarme, que no soy nadie para juzgar y señalar; soy solo una mujer en TODO el sentido de la palabra que hoy decide callar para dejarlo obrar. No tengo el poder de cambiar mi realidad, soy solo una simple mortal y mi felicidad está entre sus brazos.
Es maravilloso el camino recorrido. Sé que Dios me escucha y me entiende, está cerca de mí, me cuida y evita que sufra daño alguno. (Salmos 34.17). No me creo más de lo que Él ha hecho de mí. Una mujer sincera, honesta, con principios; he perseverado, pero he olvidado mi primer amor. He permitido que el sol del desierto que hoy hay dentro de mí, seque mis ilusiones.
Decido creer una vez más, esforzarme por hacer de nuestra relación una que honre mi amor por ti. Lo que soy te pertenece, visualizo mi presente y mi futuro junto a ti, hasta el final de mis días y después de partir. Tengo fe, me aferro a mis promesas sabiendo que hay condiciones que debo cumplir y asumo mi responsabilidad. Lo intentaré hasta que tú digas ya no más, estaré atenta a tus instrucciones, a actuar conforme a tu voluntad, solo dame la fuerza que necesito para vencer mi propio yo.
“Si hablo en lenguas humanas y angelicales, pero no tengo amor, no soy más que un metal que resuena o un platillo que hace ruido. Si tengo el don de profecía y entiendo todos los misterios y poseo todo conocimiento, y si tengo una fe que logra trasladar montañas, pero me falta el amor, no soy nada. Si reparto entre los pobres todo lo que poseo, y si entrego mi cuerpo para que lo consuman las llamas, pero no tengo amor, nada gano con eso”.

jueves, 29 de septiembre de 2016

Palabras amables

PALABRAS AMABLES
María Fontaine
La Madre Teresa comentó en una ocasión: «Las palabras amables pueden ser cortas y fáciles de decir, pero sus ecos son realmente infinitos». ¡Muy cierto! Unas cuantas palabras, enunciadas por personas sencillas, pero llenas de amor y comprensión, pueden repercutir de forma tangible e impactante en la vida de aquellos a quienes fueron dirigidas.
Lo que me impresiona es que las palabras que emitimos —que parecen decirse con naturalidad, que son muy comunes, exiguas, insignificantes y a menudo poco elegantes— pueden de hecho tener un valor incalculable y ser de gran consecuencia para quien —o quienes— se dirigen.
Lo que nos parece muy poca cosa, puede ser alimento para un alma hambrienta, o agua para un hombre que se muere de sed. Lo que damos que nos cuesta muy poco y parece muy pequeño en el orden del universo, para otra persona puede significarlo todo.
Tomado de La Familia Internacional

miércoles, 28 de septiembre de 2016

¿te crees autosuficiente?

Con frecuencia vemos a aquellos que tienen riquezas, posición, poder y los consideramos “exitosos”. Pero muchas personas que se consideran exitosas aún así carecen de paz, gozo, alegría y otras bendiciones verdaderas. Tales personas nunca han aprendido a depender por completo del poder del Espíritu Santo.
Las personas que son autosuficientes a menudo piensan que depender de Dios es señal de debilidad. Pero la verdad es que al recurrir al poder del Espíritu Santo, ellos lograrían más en sus vidas de lo que ellos podrían alcanzar en sus propias fuerzas.
Dios nos creó de tal manera que aunque tenemos fortalezas, también tenemos debilidades y necesitamos de Su ayuda. Sabemos que Él quiere ayudarnos porque envió un Ayudante Divino, el Espíritu Santo, a vivir dentro de nosotros.
A menudo luchamos sin necesidad porque no recibimos la ayuda que está disponible para nosotros. Lo motivo a depender de Él, no de sus propias fuerzas. Lo que sea que esté enfrentando, no tiene que hacerlo solo.
La Palabra de Dios para usted hoy: su peor día con Dios será mejor que su mejor día sin Él El Espíritu Santo está aquí para hablarle y ayudarlo en todos los sentidos que hoy necesite ayuda.

martes, 27 de septiembre de 2016

Mira hacia adelante

MIRA HACIA DELANTE

Miremos hacia atrás sin remordimiento habiendo aprendido de nuestros errores. Miremos hacia delante con fe y ganas de seguir perseverando. Y miremos a nuestro alrededor con amor y tolerancia.

No sólo al inicio del año se nos presenta la oportunidad de volver a empezar. También ocurre al despertar cada mañana: se nos ofrece la posibilidad de comenzar de nuevo y corregir nuestros errores, sabiendo que las misericordias del Señor se renuevan cada día.

Ten una actitud positiva; es saludable.

Las preocupaciones tienen su lugar: fuera de nuestra vida. Pongámoslas en su sitio.

El mundo —y lo que en él hay— es tan bello como lo percibimos.

Esfuérzate por aprender algo nuevo cada día.

Para descubrir, es preciso explorar.

El hombre prudente se esfuerza por dar con un equilibrio en todo, por descubrir la mejor solución, la medida justa, la magnitud, la cantidad y la proporción más acertada.

Las experiencias amargas no tienen por qué amargarnos.

No nos conformemos con dejar un mal hábito; sustituyámoslo con un buen hábito.

Aunque todos afirmen que no tienes posibilidades de lograr el éxito, no abandones los sueños que Dios ha puesto en tu corazón.

Jamás sabrás lo que puedes realizar hasta que lo intentes.

Que las circunstancias no limiten tu visión. Mira mucho más allá.

Procura sustituir las críticas que te vienen a la cabeza acerca de otros o de ti mismo por pensamientos positivos, constructivos, comprensivos. Si has aprendido a canalizar tus pensamientos por el camino angosto, verás que tus pies no tienen dificultad de seguirlos.

La vida es una combinación de éxitos y fracasos, ambos son necesarios para nuestro desarrollo y madurez.

Con frecuencia los grandes hombres sufren grandes penas, pero no se dejan derrotar.

Las adversidades nos retuercen y nos zarandean, como hace la lavadora con la ropa. Pero al final salimos relucientes, mejores que antes.

Sigue luchando aunque te den duro.
¡Y nunca jamás te rindas, ni en el peor apuro!

Los errores tienen de bueno que nos enseñan a tener paciencia con los demás. ¿Cómo podemos criticar las faltas ajenas sabiendo que las nuestras son tan numerosas?

Si bien el modo de obrar de Dios a veces nos resulta desconcertante, con el tiempo lo entenderemos, siempre y cuando confiemos en Él.

Los tiempos de prueba no tienen por qué abatirnos si los percibimos como puertas que conducen a nuevos comienzos.

Dios ama al humilde, al abatido, al que lucha por no perder sus ideales. Está cerca del quebrantado de corazón; anhela consolarlo y curarle las heridas con amor.

Si te han fallado los planes, ¿no será que existe un plan mejor que todavía no has descubierto?

Una promesa incumplida equivale a una bofetada. En cambio, una promesa que se respeta vale más que una botella de vino exquisito.

Un solo acto heroico no define quiénes somos. Lo que verdaderamente cuenta son los pequeños actos cotidianos.

No saques conclusiones precipitadas. Las probabilidades de que juzgues mal son muy elevadas.

No hay situación que no tenga su lado bueno; sólo hay que buscarlo.

Sé sincero y transparente,
como el agua de la fuente.

El éxito es peligroso, porque puede generar arrogancia. A veces es preferible no triunfar. El fracaso fomenta la humildad, elemento indispensable para hacer sentir bien a los demás.

Dios nos da Su paz, una vez que depositamos en Él nuestra confianza.

Si quieres una sesión con el mejor siquiatra, habla con Dios. Te conoce mejor que nadie.

Una mentalidad pesimista carcome como el cáncer. Extírpala rechazando todo pensamiento negativo.

Si lubricas la maquinaria de tu vida por medio de la oración, ten por cierto que funcionará con más suavidad.

El optimismo no consiste en cegarse a los problemas, sino en creer siempre que tienen soluciones.

Antes de insistir en divulgar tu opinión, pregúntate: ¿Estoy seguro de que tengo la razón, o simplemente estoy empecinado en mi idea?

Si una montaña se interpone en tu camino, rodéala. Si no puedes rodearla, pasa por encima. Si no puedes pasar por encima, detente y pregúntate si vale la pena llegar al otro lado. En caso afirmativo, cava un túnel.

Tu mente es como un jardín. Cuídala bien cultivando pensamientos positivos, alentadores y edificantes a lo largo del día.

Presta oídos enseguida a lo que te digan, pero no te dejes contagiar por la forma cómo te lo dicen, ni te apresures a sacar conclusiones.

El necio se pone en evidencia en cuanto abre la boca; mas si aprende a morderse la lengua, queda como sabio.

Los que triunfan en la vida no son los que nunca han probado las hieles de la derrota. Son los que no desisten por mucho que fracasen. Los triunfadores sacan partido a cada fracaso, aprenden de sus errores y los consideran un paso más en dirección a la victoria.

¿Te encuentras en dificultades? ¿Ha surgido algún contratiempo? Pide a Dios que te asista. Ponlo a prueba. Él es capaz de hacer lo imposible.

Si crees en Jesús, ya no eres ciudadano de este mundo, eres ciudadano del Reino de Dios.

Si necesitas con urgencia respuestas a los profundos interrogantes que te acosan, no busques en tu interior, en Internet, en las últimas tendencias de la sociedad, ni en ningún otro sitio. Recurre a Dios. Él puede y quiere respondértelos. Su palabra es fuente de sabiduría inagotable.

Dios no es solamente nuestro pronto auxilio en las tribulaciones, sino también un verdadero auxilio para evitar que nos ocurran esas tribulaciones.

El cristiano debe vivir de tal manera que en lugar de ser parte de los problemas de este mundo, sea parte de las soluciones.

El valor es como una cometa: los vientos contrarios le dan más vuelo.

lunes, 26 de septiembre de 2016

¡Ora con fe!

Mensaje de Joyce Meyer
El poder de Dios se libera cuando oramos con fe, confiamos y Le creemos, porque la fe Le agrada. La expectación es un atributo de la fe que tiene su propia clase de poder, el poder de la esperanza. La fe alcanza el reino espiritual y espera que el poder sobrenatural de Dios se muestre y haga lo que ninguna persona en la tierra podría hacer.
Por otra parte, la duda teme que nada bueno sucederá; no agrada a Dios y no es algo que Él pueda bendecir. No tenemos poder cuando vivimos en duda, decepción y falta de confianza en Dios.
Sólo piense en un momento en el cual usted no estaba realmente seguro de que Dios no le fallaría. ¿No era capaz de hacer oraciones muy poderosas, no es cierto? Ahora recuerde un momento en el que su corazón confió completamente en Dios y en verdad creyó que Él no le fallaría. ¿Usted fue capaz de orar en ese momento con tal sensación de poder, no es cierto? Este es el poder de expectación en la oración.
Incluso si las cosas no funcionan exactamente de la manera que usted esperaba que fueran, confíe que Dios sabe lo que es mejor y siga esperando que Él haga grandes cosas.
La palabra de Dios para usted hoy: Espere que Dios haga grandes cosas en su vida y ore con valentía.

viernes, 23 de septiembre de 2016

La ayuda mutua

La ayuda mutua
[Dios] nos consuela […] para que podamos también nosotros consolar… (v. 4).

Lectura: 2 Corintios 1:3-7
La Biblia en un año: 2 Corintios 8
«El cuerpo de Cristo» se utiliza más de 30 veces en el Nuevo Testamento. Pablo usa esta frase como una imagen de la Iglesia. Tras ascender al cielo, Jesús dejó su misión en manos de hombres y mujeres imperfectos e ineptos. Él asumió el papel de Cabeza de la Iglesia, y dejó las tareas de brazos, piernas, orejas, ojos y voz a discípulos erráticos… a ti y a mí.
Su decisión de funcionar como la Cabeza invisible de un cuerpo grande con muchas partes significa que confía en que nos ayudemos unos a otros en tiempos de sufrimiento. Pablo quizá tuvo esto en mente cuando escribió: «[Dios] nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios» (2 Corintios 1:4). En todo su ministerio, Pablo practicó esto, haciendo colectas para las víctimas del hambre, enviando ayudantes a lugares con necesidades y reconociendo las ofrendas de los creyentes como regalos de Dios mismo.
La frase «el cuerpo de Cristo» expresa bien lo que estamos llamados a hacer: representar en carne lo que Cristo es; especialmente, a los necesitados.

Señor, gracias por tu fidelidad al consolarme cuando estoy sufriendo. Muéstrame a alguien que necesite de mi aliento hoy.
La presencia de Dios nos reconforta; y nuestra presencia consuela a otros.

jueves, 22 de septiembre de 2016

Cuando pases por momentos dificiles...

Por el pastor Claudio Freidzon
Cuando los corazones se abren, se establece el ambiente propicio para oír la Palabra de Dios. Es allí cuando el Espíritu Santo tiene libertad para actuar y traer revelación. En la clase de hoy hablaremos acerca de hombres y mujeres que atravesaron momentos difíciles y de cómo Dios los llevó a sorprendentes resultados.
Uno de los grandes deseos del Señor es que podamos descubrir sus maravillas para poder aplicar lo que su Palabra nos enseña. En Efesios 1:18-19 vemos que el Espíritu Santo quiere alumbrar nuestro entendimiento. Si bien al nacer, Dios nos dio cinco sentidos para manejarnos en la vida, al conocer la salvación nos es dado otro sentido que es el espiritual. A partir de allí, el Señor nos comienza a mostrar su magnificencia más allá de lo que ven los ojos naturales. Jesús te ha dado la capacidad de ver lo sobrenatural. Y aunque para el mundo sea locura, para los creyentes es sabiduría.
El no creyente, siempre actuará como no creyente, a menos que decida creer. Es por eso que por más que se esfuerce, no logrará comprender lo que vive un creyente. Aunque haya tormentas, el cristiano actúa como viendo a Dios, sabiendo que todo problema es momentáneo y persevera hasta ver la victoria.
La doble porción es para ti también
Cuando Eliseo le pedía la doble porción a Elías (2 Reyes 2:9-10), en realidad estaba creyendo en un nivel de poder y autoridad superlativo. Algo que hoy está a nuestro alcance si tan solo nos dedicamos a creer y confiar en nuestro Dios. La Biblia está llena de maravillas; lo que ocurre es que algunos viven como si no las vieran. Toda esa gloria de Efesios, la forma en la que Pablo hablaba de la supereminente grandeza del poder de Dios, hace referencia a una gloria suprema. Algo que escapa a los que no tienen fe, pero da plenitud al que se anima a vivir por ella.

miércoles, 21 de septiembre de 2016

¿Listo para un cambio?

¿Listo para un cambio?
Mas el fruto del Espíritu es […] dominio propio (vv. 22-23 LBLA).

Lectura: Gálatas 5:16-25 
La Biblia en un año: 2 Corintios 6
El dominio propio es tal vez una de las cosas más difíciles de lograr. ¿Cuántas veces hemos sido derrotados por un mal hábito, una pésima actitud o una perspectiva equivocada? Hacemos promesas de mejorar. Le pedimos a alguien que nos ayude, rindiéndole cuentas. Pero, en el fondo, sabemos que no tenemos la voluntad ni la capacidad de cambiar. Podemos hablar, hacer planes, leer libros de autoayuda, ¡pero nos resulta difícil vencer y controlar muchas de las cosas de nuestro interior!
¡Felizmente, Dios conoce nuestra debilidad, y también el remedio! La Biblia dice: «Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, dominio propio…» (Gálatas 5:22-23 LBLA). La única manera de tener dominio propio es dejar que el Espíritu Santo nos controle.
Es decir, nuestro enfoque no debe ser el esfuerzo, sino la consagración: vivir cada momento en sumisión al Señor, confiando en Él y no en nosotros mismos. Pablo señala que este es el significado de «andad en el Espíritu» (v. 16).
¿Estás listo para un cambio? Puedes cambiar porque Dios está en ti. Al entregarle el control, el Señor te ayudará a producir el fruto de su semejanza.
— jfg

Señor, necesito tu poder para poder cambiar y crecer. Me entrego a ti. Ayúdame a entender cómo ser sumiso para ser lleno de tu Espíritu.
A Dios le interesa más nuestra consagración a Él que nuestras habilidades.

martes, 20 de septiembre de 2016

PREPARADOS PARA LA BODA

Preparados para la boda
Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora (v. 13).

Lectura: Mateo 25:1-13
La Biblia en un año: 2 Corintios 5
«T engo hambre», dijo mi hija de 8 años. «Lo siento —le dije—, pero no tengo nada para que comas. Juguemos a algo». Habíamos estado esperando por más de una hora la llegada de la novia a la iglesia. Se suponía que la boda sería al mediodía. Mientras me preguntaba cuánto tiempo más habría que aguardar, esperaba mantener a mi hija ocupada hasta que comenzara la ceremonia.
Sentí como si estuviéramos viviendo una parábola. Nuestra casa está a pocos pasos de la iglesia, pero sabía, que si iba a buscar unas galletas, la novia podría llegar en cualquier momento y yo no podría verla cuando entrara. Mientras empleaba varias técnicas de distracción con mi hija, pensé en la parábola sobre las diez vírgenes (Mateo 25:1-13). Cinco llegaron preparadas con suficiente aceite para mantener encendidas sus lámparas mientras esperaban al novio, pero cinco no. Así como era muy tarde para que yo fuera hasta nuestra casa, también era tarde para que las jóvenes fueran a comprar más aceite para sus lámparas.
Jesús contó esta parábola para enfatizar que debemos estar preparados porque, cuando Él vuelva, rendiremos cuentas de cómo está nuestro corazón. ¿Estamos esperando preparados?

¿Cómo esperas el regreso de Jesús? ¿Has dejado algo sin hacer que podrías haber realizado hoy?
Tenemos que estar preparados para cuando Cristo venga otra vez.

lunes, 19 de septiembre de 2016

Tener fe es hacer lo que Dios te pide hoy

TENER FE ES HACER LO QUE DIOS TE PIDE HOY

David B.

Basta con tener fe para el día de hoy. Dios nos da fuerzas para el día de hoy nada más. «Como tus días serán tus fuerzas» (Deuteronomio 33:25). Te da la unción para la ocasión y gracia para soportar la prueba, en el momento preciso en que la necesitas, no antes. No necesitas fe hoy para el día de mañana. ¡Confía en Dios! Tu Padre celestial te ama. Así como te cuida hoy, te cuidará mañana.
Jesús dijo: «No os angustiéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su propia preocupación. Basta a cada día su propio mal» (Mateo 6:34). ¡No te preocupes más por el día de mañana! Es un mandato, no es optativo. No es tan solo un buen consejo; ¡es una orden! Llegado el día de mañana, Dios se encargará de todo.

Tomado de la biblioteca de La Familia Internacional

viernes, 16 de septiembre de 2016

Una relación mas estrecha

UNA RELACIÓN MÁS ESTRECHA
No necesitamos gritar nunca a través de los espacios a un Dios ausente. [Él] está más cerca que nuestra propia alma, más que nuestros pensamientos más secretos. A. W. Tozer (1897–1963)
A Dios se lo conoce en el silencio. Él se manifiesta por medio de misterios. Robert Hugh Benson (1871–1914)
Haber hallado a Dios no es un fin sino un comienzo. Franz Rosenzweig (1886–1929)
Buscad leyendo y hallaréis meditando; llamad orando y se os abrirá contemplando. S. Juan de la Cruz (1542–1591)
Cuando una persona me dice: «A mí lo que me pasa es que no amo al Señor con la devoción que debería», le respondo: «No. Lo que te pasa es que no sabes cuánto te ama Él». Selwyn Hughes (1928–2006)
Llega un momento en que no tengo nada más que decirle a Dios. Si siguiera rezando con palabras, tendría que repetir lo que ya he dicho. En esos momentos es magnífico expresarle: « ¿Puedo morar en Tu presencia, Señor? No tengo nada más que decirte, pero me deleito en estar en Tu presencia». Ole Hallesby (1879–1961)
Dios da esperanzas a quienes sueñan. Concede milagros a quienes creen. Nunca defrauda a quienes confían y nunca abandona a quienes andan con Él. Nishan Panwar
Tomado de la biblioteca de La Familia Internacional

jueves, 15 de septiembre de 2016

¡No te preocupes de mañana; vive el día de hoy!

"¡No os afanéis por el día de mañana!" (Mat.6:34)

     Siempre sufrimos la tentación de preocuparnos por el mañana. Pero la Palabra de Dios nos prohíbe tener miedo del futuro. Jesús dijo: "No os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán." ¡Mañana será otro día! "Pues basta a cada día (hoy) su propio mal." (Mat.6:34) ¡Esa es la advertencia, el mandamiento y la promesa de Dios!
     Debes disfrutar del día de hoy y tomarte las cosas tal como vengan; ¡mañana será otro día! "¡Pues como tu día serán tus fuerzas!" (Deut.33:25) Dios te dará fuerzas para el momento, y gracia para la prueba, cuando llegue la hora, en el momento. ¡No antes! "¡El que comenzó en ti la buena obra la perfeccionará hasta el fin! ¡Porque Él es el Autor y Consumador de la fe; el cual nos ha librado, nos libra, y aún nos librará!" (Fil.1:6; Heb.12:2; 2Cor.1:10) Él te ama y vela por ti, y te cuidará pase lo que pase.
     Así que por el amor de Dios, ¡no te preocupes del mañana! ¡No es de tu incumbencia, no es problema ni asunto tuyo! ¡Es asunto de Dios!
     "¡A mí no me importa el mañana! Es cosa de mi Salvador. Me falta aún la fuerza y la gracia, no quiero la preocupación." ¡Confía en el Señor! ¿Amén?

miércoles, 14 de septiembre de 2016

Cada buena obra sera recompensada por Dios

Un empleador es considerado justo y bueno cuando paga a sus trabajadores por el tiempo trabajado y por el respeto con que trata a su gente. Y si existen jefes terrenales que hacen esto, ¿Cuanto más crees que el Señor hará por sus hijos?. Tarde o temprano, cada buena obra que realices, tendrá su justa recompensa del Señor. Cada acto de amor sincero, desinteresado, cada semilla que sembramos en otros sin esperar nada a cambio, es algo que agrada siempre al Señor. Es muy especial la felicidad que obtenemos cuando tratamos con amor y respeto a las personas.
Cuando colaboramos porque nos brota del corazón hacerlo. Son semillas de vida y bendición que vamos a cosechar en algún momento. Las oraciones que realices darán fruto, las palabras de aliento que des, la ayuda material, el tiempo de compañía que pases con tus seres queridos, serán tu paz, alegría y felicidad. Dios recompensa todas las obras que se realizan desde un buen corazón.
Oremos así:
“Señor, a partir de hoy sembraré todo tipo de semillas espirituales y materiales que tenga para dar, porque mi propósito es ser de bendición. Te agradezco porque sé que nunca olvidas las buenas acciones, guíame a dar con sabiduría, en el nombre de Jesús. Amén”

martes, 13 de septiembre de 2016

Fracasando para triunfar

FRACASANDO

A un destacado industrial se le preguntó cómo había llegado a un éxito tan marcado en sus actividades. Y el hombre se limitó a contestar: «Fracasando». A primera vista, su respuesta parece un error o una broma. ¿Cómo alguien podría triunfar mediante el fracaso? Sin embargo, la palabra de este exitoso industrial encierra un pensamiento digno de consideración.
Se dice que en el trabajo de los investigadores, casi siempre cuando llegan a un fracaso luego de mucho esfuerzo, les espera poco después un buen descubrimiento.
Parecería que los fracasos y las derrotas fueran como el cuaderno lleno de errores y borrones, con el que comenzamos a escribir. Tenemos que pasar primero por esa etapa, antes de poder aprender a escribir correctamente.
¡Cuánto nos contrariamos frente a un fracaso, sin reflexionar que detrás de él y de la lección que nos enseña, puede estar escondido un éxito brillante! Por supuesto, a todos nos agradaría triunfar sin tener que fracasar primero. Pero como esto no siempre es  posible, debemos admitir los fracasos sin temor, como un estímulo para la superación. 
¿Te espantan los fracasos que has tenido, o quizá alguno que tengas en este preciso momento? Entonces es hora de que te levantes con fe, optimismo y voluntad. Hoy Dios puede tenderte Su mano poderosa. El que anda con Dios siempre llega a su destino. «Al que a Mí viene, no le echo fuera». (Jn. 6:37)

lunes, 12 de septiembre de 2016

Ponte en las manos del maestro tallador

Mi esposa y yo conocimos a Phipps Festus Bourne en 1995, un experto artesano de la madera cuyas obras son réplicas casi exactas de objetos reales. «Tallar un pato es sencillo —decía—. Basta mirar un trozo de madera, pensar en cómo es un pato y, luego, cortar todo lo que no se parezca a él».
Así es con Dios. Él nos mira —ve madera en bruto— e imagina la persona con el carácter de Cristo escondida bajo la corteza, los nudos y las ramitas; luego, comienza a tallar, quitando todo lo que no encaje con esa imagen. Nos sorprenderíamos si pudiéramos ver cuán hermosos somos como «patos» terminados.
Pero, primero, tenemos que aceptar que somos un trozo de madera y dejar que el Artista nos corte, moldee y pula donde Él quiera. Esto significa ver nuestras circunstancias —agradables o desagradables— como herramientas de Dios que nos moldean. Él nos forma, parte por parte, para convertirnos en la hermosa criatura que imaginó en nuestro poco agraciado trozo de madera.
A veces, el proceso es maravilloso; otras veces, doloroso. Pero, al final, todas las herramientas de Dios nos conforman «a la imagen de su Hijo» (Romanos 8:29).
¿Anhelas esa semejanza? Ponte en las manos del Maestro Tallador.

viernes, 9 de septiembre de 2016

Testimonio de vida

El gerente de Nike para América del Norte, entregó su vida a Cristo cuando atravesaba momentos difíciles.
Jordan Rogers admitió que no hubiese llegado a tener éxito en su carrera, si no fuera por Dios, quien lo libró de las drogas y el suicido.
En un video del proyecto cristiano “Soy Segundo”, Rogers dijo que hace 13 años es libre de la adicción a las sustancias dañinas. Hoy ve a las drogas como una pesadilla que no quiere vivir más.
“La heroína llegó a mi vida cuando cumplí 15 años de edad. Un amigo mío estaba haciendo algo y cuando él levantó su cabeza tenía una mirada de una aparente satisfacción”, dijo Rogers a Christian Today.
Antes de los 20 años, Rogers ya era totalmente adicto a la heroína y no podía dejarlo. Su adicción a las drogas lo ponía tan mal, que necesitaba sustancias más fuertes para hacerle sentir aliviado. Pero ya nada funcionaba, entonces Rogers pensó en el suicidio.
“Tuve ese agujero negro en mi alma y sólo quería cambiar la forma como me sentía. Yo quería ser nuevamente una persona normal, quería sentirme igual que todos”, dijo.
La adicción de Rogers fue tan fuerte, que incluso consideró acudir a un centro de recuperación. Finalmente, un tribunal ordenó internarlo en una prisión por un delito que cometió. Fue allí donde conoció a Dios.
“En una oportunidad en la prisión, pensé que yo no estaba hecho para esto. Merezco estar aquí, pero no pertenezco aquí. Ya no tenía las drogas y alcohol para echarles la culpa, estaba completamente sobrio para darme cuenta de las consecuencias de mis actos”.
A pesar de haber ignorado a Dios durante toda su vida, Rogers inclinó su cabeza y oró a Dios pidiendo ayuda: “Dios… Necesito tu ayuda”. dijo.
“Mi vida tenía que cambiar drásticamente. Estaba en ese momento destrozado”, recuerda. “Doy gracias a Dios porque pasé 13 meses en prisión y cada minuto que pasaba era para tener la oportunidad de continuar luchando”.
Después que salió libre, conoció el Evangelio de Salvación y entregó su vida a Cristo, considerando ese momento, como el mejor de su vida.

jueves, 8 de septiembre de 2016

¿Estas pasando por un momento difícil?

Por Joyce Meyer
¿Está pasando por un tiempo difícil? Tal vez acaba de perder su trabajo, o está sufriendo por una muerte en su
familia. O tal vez simplemente no está seguro de que algo bueno pueda pasar en su vida. Cualquier cosa por la que
este atravesando, quiero que sepa que no está solo y algo bueno puede salir de la situación difícil en la que usted
está. Dios lo ha prometido.
Jesús también experimentó duros momentos…el camino a la cruz no fue algo de poca importancia, pero Él tuvo que
decidir atravesar ese camino. Él incluso le pregunto a Dios si esto en realidad era necesario. (Pero sabemos cómo
esta maravillosa historia de amor termina.)
¿Viernes Santo es realmente bueno?
Al celebrar Su resurrección, me gusta mirar cómo vamos a través de nuestros propios tiempos difíciles. Creo que
también pasamos por nuestra propia privada crucifixión y resurrección con cierta regularidad. A menudo digo
“Viernes siempre viene antes del Domingo.”
¿Se ha preguntado por qué nos referimos al día de la muerte de Jesús como Viernes “Santo”, ya que es pues un día
en el que ha habido tanto dolor, agonía y angustia? Bueno, es porque el resultado de este particular Viernes fue la
resurrección de Cristo de entre los muertos el Domingo, esto fue Sagrado.
En nuestra vida cotidiana, tenemos que creer que cuando pasamos por tiempos difíciles, el resultado será bueno.
Pero cuando estamos sufriendo, probablemente una de las cosas más difíciles para nosotros recordar es que Dios
va a resolverlo para nuestro bien.
El Único En Que Puedes Confiar
¡Todas las cosas Trabajan juntas para nuestro bien! Mi esposo Dave dice que esto es una escritura clave para los
cristianos cuando pasamos por difíciles o decepcionantes momentos. Cuando algo no sucede de la manera que nos
gustaría que sucediera, podemos creer que Dios lo resolverá para bien. A ese lugar siempre se puede volver en todo
tipo de pruebas.
Ahora bien, esto no significa que las pruebas son necesariamente buenas, pero Dios puede hacer que trabajen para
nuestro bien porque Él es impresionante. ¡Dios tiene que ser maravilloso para ser capaz de tomar las cosas malas y
usarlas para nuestro bien!
Si amamos a Dios y realmente queremos Su voluntad para nuestra vida, creo que es seguro decir que podemos
confiar en Él y que todo saldrá bien, no importa lo que nos pase. Incluso si nos hemos desviado debido a nuestra
propia estupidez o si somos inocentes pero alguien más se involucra y trae dolor y sufrimiento a nuestra vida,
podemos confiar que Dios lo resolverá. 

miércoles, 7 de septiembre de 2016

¡Para lograr algo tenemos que hacer algo!

Por Esteban Correa
“Porque como el cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe sin obras está muerta” Santiago 2:26
Siempre que ejecutemos una acción, que intentemos algo, que probemos, estaremos muy cerca de resultados positivos, cuando no realizamos ninguna acción, ni arriesguemos cosas estaremos muy lejos de la bendición.
El principio de la ejecución nos dice: “Para lograr algo, tenemos que hacer algo, de lo contrario no habrá posibilidades de triunfar, en la acción hay reacción y por ende posibilidades concretas”.
Nunca arriesgar es un fracaso, porque cuando intentas cosas te acercas al éxito, pero si no lo intentas, jamás el éxito te golpeará la puerta. Fuimos creados para conquistar cosas, para alcanzar, para hacer algo que nos beneficiará a nosotros y a muchos más. Tu felicidad en Dios está del lado de la acción. Cuando ejecutes tu propósito por el cual fuiste creado es cuando cumplirás el plan de Dios, pero todo esto requiere algo: Ejecución. Cuando te sea revelado este principio verás la ley de la ejecución por todos lados, y por supuesto, donde primero la debemos ver es en la biblia.
Eclesiastés 11:4 nos dice: “El que al viento observa, no sembrará; y el que mira a las nubes, no segará”.
La biblia esta llena de historias de acción, historias de personas como nosotros que a pesar de sus errores, debilidades y temores dieron el gran paso de tomar riesgos confiando en Dios y finalmente alcanzaron las promesas.
En hebros 11 del verso 7 al 40 observamos el desfile de los héroes de la fe, ellos sabían que la fe sin obras era muerta, el verso 33 dice: “Por fe conquistaron reinos, hicieron justicia, alcanzaron promesas, taparon bocas de leones…”. El denominador común es un verbo, una acción “conquistaron, hicieron, alcanzaron, taparon”. La fe no es pasividad o resignarse a esperar.
Dios le dice a Josué “Todo lo que emprendas prosperará”, y estamos muy acostumbrados a escuchar “Dios te prosperará” como algo mágico, pero nos olvidamos de la otra parte del texto: “lo que emprendas”, también es ejecución, del verbo emprender, que significa hacer algo. También en la vida de José se manifestó el mismo principio de ejecución y lo resume de esta manera al final del verso 23 de Génesis 29: “Jehová estaba con José, y lo que él hacía, Jehová lo prosperaba”. Notemos que no era una simple bendición, sino que Dios bendecía lo que José hacía.
Si miras atrás en tu vida te darás cuenta que todo lo que lograste fue porque accionaste y te animaste. Seamos como José y Josué por un lado siempre fieles y pacientes, pero sin dejar de lado el esfuerzo, la acción y el espíritu emprendedor. Hoy el Señor nos dice: “Todo lo que emprendas te saldrá bien” ¡Simplemente Hazlo!

martes, 6 de septiembre de 2016

¡Se una persona honorable!

Mientras daba un discurso bien promocionado, un respetado líder y estadista captó la atención de sus conciudadanos al declarar que la mayoría de los miembros del Parlamento de su nación eran poco honorables. Tras citar hábitos de corrupción, actitudes pomposas, vocabulario desagradable y otros vicios, reprendió a los parlamentarios y los instó a cambiar. Como era de esperar, sus comentarios cayeron mal y los acusados lo contraatacaron criticándolo.
Quizá no seamos funcionarios públicos en posición de liderazgo, pero quienes seguimos a Cristo somos «linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios» (1 Pedro 2:9). Como tales, nuestro Señor nos llama a vivir vidas que honren su nombre.
Pedro, el discípulo, tenía algunos consejos prácticos sobre cómo hacerlo, y nos rogó abstenernos «de los deseos carnales que batallan contra el alma» (v. 11). Aunque no usó la palabra honorable, nos exhortó a comportarnos como es digno de Cristo.
En Filipenses, el apóstol Pablo lo expresa así: «todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad» (4:8). Sin duda, una conducta que honra al Señor tiene estas características.

lunes, 5 de septiembre de 2016

En contra de lo que diga el mundo

EN CONTRA DE LO QUE DIGA EL MUNDO

Vivimos tristemente en una sociedad egoísta, donde los que tienen riquezas son los  escuchados,  alrededor del mundo a diario se crean leyes que van en contra de lo que Dios ha establecido en su palabra, pues él lo predijo: a lo bueno llaman malo y a lo malo llaman bueno (Isaías 5:20), han sacado su palabra de las escuelas y de muchos lugares públicos e incluso se ha prohibido la oración en algunos lugares, y así cada día el mundo se aterra de conflictos, terrorismo, desastres pero aun ese no es el lloro y el crujir de dientes.
¨Dios preside el tribunal del cielo, y dicta su sentencia contra los dioses allí reunidos: ¿Hasta cuándo seguirán ustedes siendo injustos en sus juicios, y defendiendo a los malvados?  ¡Defiendan a los huérfanos y a los indefensos! ¡Háganles justicia a los pobres y a los necesitados!¨ Salmos 82: 1-3 TLA.
Muchos sin el más mínimo temor de Dios, creen poderlo todo, se creen dueños del mundo, lastimando cada día la clasemenos favorecida por el hombre, pero muy favorecida para Dios; hasta donde llegaremos, no podemos hacer nada en contra de lo que Dios dijo que se cumpliría, pero también es cierto que permite estas situaciones no para que aleguemos sino para sacarle el mejor provecho y este es, llevar a esas almas desconsoladas y perdidas a los Pies del señor.
¨ ¡Libren del poder de los malvados a los pobres e indefensos!  Los malvados no saben nada ni entienden nada; ¡vagan perdidos en la oscuridad! Eso hace que se estremezcan todas las bases de este mundo.¨ Salmos 82: 4-5 TLA.
La verdadera libertad de un pueblo no está en revolucionarse, en hacer huelgas, en hacer paros en sus actividades, pues son tenidas en poco, no son escuchados y las soluciones son paños de agua tibia lastimosamente.
La verdadera libertad del pobre y del indefenso está en Cristo, la biblia dice: ¨Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud.¨ Gálatas 5: 1  RVR1960.
La lucha entre el reino de Dios y las tinieblas es constante, así como se levanta el mal, así hay muchos hermanos alrededor del mundo haciendo la obra de Dios y eso no lo vemos, esas noticias no son importantes para los medios, pero llegara el díaque esa batalla llegara a su fin y seremos mas que vencedores por medio de aquel que nos amó. Saquémosle provecho a esas tristes situaciones que viven las personas menos afortunadas, acerquémonos a ellas, llevémosle la palabra, brindémosles la  mano aquel que tiene hambre, que ha sido desplazado de sus tierras, aquel que ha sido abusado. Preparemos los corazones para que esas almas le abran las puertas de su corazón a Dios. Por qué de las injusticias y de las leyes Dios se encarga, ya ha decretado en su palabra juicio para  aquel que no tuvo temor de él. ¨Ya les he dicho que ustedes son dioses, que son hijos del Dios Altísimo; pero acabarán como todos los hombres: ¡morirán como todos los gobernantes!  Dios nuestro, ¡ven a gobernar el mundo! ¡Tuyas son todas las naciones!¨ Salmos 82: 6-8 RVR 1960.

¡Si ya eres libre reten tu libertad, y ayuda a otros para que lo sean!

Autora: Jessica Terán