SONRÍE, ¡DIOS TE AMA!
Sonríe. ¡Dios te ama! Sigue sonriendo, y los demás también lo harán.
De vez en cuando hace bien reírse de uno mismo.
¿Quieres eliminar las arrugas de tu rostro? Sonríe.
Sonríe. Puede que tu sonrisa sea el rayo de sol que alguien necesita en un día gris.
La alegría de corazón constituye buen remedio, pero un espíritu abatido puede ser causa de enfermedad.
La vida es como una caja de bombones. Cada uno tiene un aspecto distinto. Unos son crocantes, otros tienen nueces; unos son dulces, otros masticables. Pero todos son deliciosos a su manera, y si faltara alguno, la caja estaría incompleta.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario