“Todos nosotros debemos agradar a nuestro prójimo y hacer las cosas para su bien y para la edificación mutua.” (Romanos 15:2 DHH)
Escuchar es probablemente la habilidad más importante para construir amistades y relaciones, porque no puedes amar a las personas sin escucharlas.
Hay una gran diferencia entre oír y escuchar. Puedes oír a alguien sin verdaderamente escucharlo. No puedo decirte la cantidad de veces que tuve discusiones con mis hijos o mi esposa porque yo estaba escuchando las palabras y no las emociones. Algunas veces las palabras son lo menos importante. Alguien te puede decir, “Estoy bien”, pero la forma en que lo dice deja ver que no lo está. Escuchar significa que también oyes lo que la personano está diciendo.
Eso se llama empatía. Empatía significa que te pones en los zapatos de la otra persona. Aprendes sus puntos de vista. Pregúntate a ti mismo, “¿Cómo me sentiría si estuviera en esa situación?”
Escuchar con empatía significa que escuchas sin interrumpir y que escuchas sus miedos y sus sentimientos. Escuchas lo que no están diciendo. No tratas de solucionar la situación. ¡Algunas veces la sanidad viene solo por escuchar!
Romanos 15:2 dice, “Todos nosotros debemos agradar a nuestro prójimo y hacer las cosas para su bien y para la edificación mutua.” (DHH)
¿Qué significa ser considerado o llevar la carga de la duda de otros? Significa que cuando las personas sufren tanto dolor y están tan heridas que ni siquiera saben lo que creen, merecen la devoción de un amigo leal – alguien que va a estar presente y va a escuchar con empatía.
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