ACTOS DE BONDAD
Cuando optamos por concentrarnos exclusivamente en nuestras metas, obligaciones e intereses, haciendo caso omiso de las personas que nos rodean, nos volvemos más egocéntricos y nos aislamos. Hasta es posible que terminemos divagando sin rumbo en nuestro propio universo. Al final, somos el resultado de las decisiones que tomamos a diario.
Cada uno de nosotros tiene oportunidades de tomar decisiones basadas en el amor al prójimo y el deseo de ayudar a la humanidad. Todos los días podemos realizar actos de bondad.
Ponernos en el lugar de los demás y tratar de imaginarnos los motivos por los que actúan como lo hacen es mucho más gratificante que criticarlos. Además, genera compasión, tolerancia y benevolencia. Un sabio dijo en cierta ocasión: «Dios mismo no tiene pensado juzgar a las personas hasta el fin de sus días. ¿Por qué habríamos de hacerlo nosotros?»
La Familia Internacional
No hay comentarios.:
Publicar un comentario