Cuando oras, Yo obro
Palabras de Jesús
Por naturaleza, algunas personas tienen
una voluntad férrea y mucho dominio propio; pero no es lo más común. Si te
resulta difícil cumplir un propósito que te has hecho, acostumbrarte a realizar
cierta actividad o cultivar un nuevo hábito, tengo buenas noticias para ti.
Conmigo tienes una ventaja especial: la de contar con Mi ayuda.
Mi Espíritu puede obrar en tu vida de
diversas maneras. Puedo, por ejemplo, darte autodisciplina. La clave para
beneficiarte de esa ayuda es la oración. En primer lugar porque cuando tú oras
Yo obro. De algún modo —tal vez incluso inesperado— hago algo en
respuesta a tu oración.
En segundo lugar porque el hecho de
pedirme ayuda en determinada situación te da acceso a Mi perspectiva y
sabiduría, y eso te permite ver las cosas más claramente. Y por último —aunque
no por ello menos importante—, porque cuando oras puedo indicarte qué medidas
tomar para acercarte a tus objetivos. Yo soy muy práctico, y te conozco. Dado
que Yo entiendo tus procesos mentales, ¿quién mejor que Yo para transmitirte
ideas y consejos que te sirvan para llevar a cabo tus propósitos, adquirir
nuevas costumbres y lograr que tengan el resultado deseado?
Aunque tienes la ventaja de contar
conmigo, será necesario que tú pongas de tu parte. Yo no voy a calzarte las
zapatillas de deporte ni atarte los cordones. No voy a deshacerme de las
galletitas que te compraste poco después de tomar la resolución de reducir tu
consumo de azúcar. Sin embargo, sí puedo ayudarte a encontrar tu clave
personal, tu ímpetu, tu motivación para hacer lo que tienes que hacer y
abstenerte de lo que debes dejar de hacer. Siempre te toparás con las
dificultades que afronta todo ser humano; pero la ventaja de contar conmigo es
que las encararás con una determinación que trasciende lo humano.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario