Humildad
y grandeza
Cuanto
más vivo, más me convenzo de que cada uno de nosotros posee cualidades de
héroe. Todos nos enfrentamos a contrariedades y dificultades. A lo largo de
nuestra vida, todos pasamos por momentos en que somos capaces de elevarnos por
encima de nuestros instintos humanos más bajos y convertirnos en ángeles con
una vocación sublime. Cuando respondemos a ese llamamiento nos volvemos héroes
en el más genuino sentido de la palabra. William Holland
El
mundo mide la grandeza en función del dinero, la elocuencia o las dotes
intelectuales que uno posea, o incluso por su destreza en el campo de batalla.
El Señor, en cambio, aplica el siguiente patrón de medida: «En el reino de
Dios, las personas más importantes son humildes como este niño». John Henry
Jowett
Riquezas,
honra y vida son la remuneración de la humildad y del temor del Señor. Proverbios 22:4
Se
realizan muchas grandes acciones en las pequeñas luchas. La vida, la desgracia,
el aislamiento, el abandono, la pobreza, son campos de batalla que tienen sus
héroes; héroes oscuros más grandes a veces que los ilustres. Victor Hugo
No se
deben confundir la notoriedad y la fama con la grandeza. Muchos que hoy
ostentan un título no saltaron a la fama ni obtuvieron su fortuna por méritos
propios. Por otra parte, he conocido personas de grandeza indiscutible y que
desempeñan una labor muy poco reconocida. La grandeza es una cualidad del
espíritu. No tiene nada que ver con la posición que uno ocupe entre los mortales.
Nadie —y menos aún un simple ser humano— confiere grandeza a otro, pues es un
estado que se alcanza, no un premio. La grandeza corona a un conserje con la
misma facilidad que a una persona de destacada posición social. Sherman
Finesilver
No hay comentarios.:
Publicar un comentario