Unos versos que el Señor me
inspiró hace un tiempo:
No con el poder nuestro,
sino que con las fuerzas del maestro...
No con la propia inteligencia,
sino con Su sabia asistencia.
No con el imperfecto amor humano,
sino con el roce de Su mano...
No con ideas de mi propia factura,
sino con Su humilde investidura.
No con intereses egoístas,
sino con alientos altruistas.
No con blindajes ni con armas,
sino con acciones solidarias.
No sólo con medios materiales,
sino con recursos celestiales.
sino que con las fuerzas del maestro...
No con la propia inteligencia,
sino con Su sabia asistencia.
No con el imperfecto amor humano,
sino con el roce de Su mano...
No con ideas de mi propia factura,
sino con Su humilde investidura.
No con intereses egoístas,
sino con alientos altruistas.
No con blindajes ni con armas,
sino con acciones solidarias.
No sólo con medios materiales,
sino con recursos celestiales.
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